Leo en la revista Anales de Pediatría un artículo: “Perfil de los adolescentes que acuden a urgencias por intoxicación enólica aguda”.
Se ha realizado en el Hospital Universitario Sant Joan de Déu de Esplugues de Llobregat, Barcelona, por médicos de la Unidad de Conductas Adictivas del Servicio de Psiquiatría y Psicología y de la Sección de Urgencias del Servicio de Pediatría.
Sabemos del incremento de las consultas a los Servicios de Urgencia (SU) de jóvenes por intoxicación etílica aguda (IEA). El estudio plantea conocer el perfil psicosocial de estos adolescentes.
Para ello “se entrevistaron telefónicamente a 104 familias de casos de adolescentes atendidos en el SU por una IEA y se comparó con 104 controles emparejados por edad y sexo, para obtener datos sociodemográficos, clínicos, académicos y de funcionamiento familiar.”
El estudio refleja que «el 72% de los adolescentes que consultaron por una IEA tenía una edad inferior a 16 años. El 37.7% repitió un curso escolar, el 20% presentó absentismo escolar y el 19.6% abandonó los estudios básicos. El 9.8% estaba en tratamiento psiquiátrico. Sólo el 11,4% de los pacientes fueron derivados a un dispositivo especializado». Al igual que los datos publicados anteriormente, «en la muestra estudiada se observa una mayor prevalencia de mujeres (58,7%) que consultan por IEA en urgencias. Esta realidad se ha justificado por una mayor vulnerabilidad del sexo femenino a los efectos del alcohol». Llama también la atención el bajo porcentaje de derivación a unidades de tratamiento especializadas de los pacientes que acuden a los SU, «datos también observados en estudios previos, y que pueden reflejar una política de tolerancia y laxitud por parte de la sociedad en relación con los episodios de intoxicación por alcohol».
Plantea como conclusiones “la necesidad de desarrollar protocolos de actuación en los SU que contemplen no sólo los parámetros bioquímicos/toxicológicos sino que también incluya la valoración de parámetros psicosociales”(…)“consultar a un SU pediátricas por una IEA no es indicativo, por sí solo, de que exista una repercusión a nivel psicosocial directamente asociada a dicho consumo. Esto indica que podemos encontrar dentro de este grupo heterogéneo diferentes formas clínicas de gravedad” (…) “existen evidencias de que una intervención precoz puede tener carácter preventivo por lo que la consulta en urgencias puede constituirse en una oportunidad para iniciar dicho proceso. Por tanto, los servicios de urgencias pueden desempeñar un papel clave en la detección rápida y precoz de los adolescentes que consumen alcohol de forma abusiva o problemática, ya que éstos suelen consultar antes en estos servicios que a los especializados en el ámbito de las adicciones. La literatura existente ha evidenciado que realizar una intervención breve en los mismos SU es efectiva, tanto en la reducción de conductas problemáticas futuras como disminuyendo la cantidad y la frecuencia de alcohol ingerido, así como incrementando la vinculación a unidades de tratamiento especializadas”.
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Una respuesta a «Intoxicación enólica aguda en adolescentes»